jueves, 12 de junio de 2008

y cuando decir adiós se antoja imposible

nunca me han gustado las despedidas; son un momento de la vida en el que nunca sé qué decir, me quedo en blanco.

"nos vemos a la vuelta", suelo decir cuando sé que es temporal. y ahora, sólo ahora, me doy cuenta de lo fácil que resultaba decir aquella frase. lo difícil es hablar cuando sabes que no volverás a ese lugar, que la gente de la que te despides tampoco lo hará, y que ese lugar dejará de ser lo que es porque el día que vuelvas, si es que lo haces, habrá cambiado tanto que ya no verás caras conocidas, sólo te cruzarás con recuerdos de lo que fue y dejó de ser.

es por eso que no me gusta volver a los lugares en los que he sido feliz, porque prefiero quedarme con aquel bonito recuerdo antes que taparlo con otros nuevos, aunque sean también buenos. pero todo depende de la compañia, pues si se vuelve con las mismas personas puede llegar a ser mucho mejor si cabe.

quizá esta vez lo mejor sea volverse a despedir como si fuéramos a vernos a la vuelta de las navidades o de cualquiera de nuestros viajes.

"nos vemos, pues, a la vuelta, hermanos"

3 comentarios:

xeixa dijo...

Lo que ahi que hacer es no volver esperando encontrar lo mismo, si no abrir tanto la mente que quepan los recuerdos del pasado y no tener miedo de los momentos que encontraremos en el futuro porque seguro que ahi espacio para ambos, las cosas siempre cambian pero eso es bueno porque si no todo seria siempre igual.
Pero de todas maneras siempre es duro cuando el recuerdo que te llevas es uno de los mejores de tu vida.

kaO¡ dijo...

Compartimos pelis, todas. Y ese libro.
Y además, me gusta como escribes.
Te sigo

Sombra de Luna dijo...

Yo tambien odio las despedidas...La verdad esque las evito siempre que puedo.
muchos besos.