miércoles, 21 de mayo de 2008

donde quiera que estés

no me he visto con fuerzas hasta ahora para hablar de ti. pero creo que ha llegado el momento de romper las barreras que surgen siempre con un acontecimiento de este tipo.

son muchas las cosas que recordaré de ti siempre, entre ellas tu risa contagiosa, tu sonrisa, más bonita que ninguna, tus andares, tus abrazos, tu ilusión por vivir, tu lucha por cambiar las cosas y aportar algo a la vida, tu granito de arena. son demasiados los adjetivos que podría decir que te identifiquen, todos ellos buenos, no porque te hayas ido y te quiera hacer la pelota, sino porque de verdad que lo son. eras un grande y lo serás siempre en nuestros corazones.

te fuiste en lo mejor de la vida, precisamente porque a la edad de 23 años se está así, lleno de vida; sin embargo, algo decidió que era tu momento y, aunque sea muy triste, sé que te has ido cargadito de vivencias y de sueños alcanzados. porque tu no te conformabas tan sólo con soñar, tu eras de los que hacían realidad sus sueños a base de empeño y de ganas, las cuales las sacabas de cualquier parte. has sido muy valiente, Pablo, por arriesgarte a vivir lo que querías vivir, y estoy segura, como dijo nuestro amigo Neibil, que te encuentras entre las estrellas persiguiendo cometas, porque a ti el mundo se te quedaba pequeño y querías más, mucho más.

hoy hay una luna llena preciosa dándome las buenas noches, y sin saber porqué te imagino sentado en ella, con los pies colgando, y una sonrisa de tonta se me dibuja en la cara.


hasta siempre amigo, descansa en paz en tu selva amada, la única que pudo despedirse de ti...


nos vemos en cualquier parte

1 comentario:

Os-K-r dijo...

Leo entre lineas una historia muy triste, que convierte en banal, quizás, aquello sobre lo que escribo yo.

Ánimo, ánimo y ánimo, vale?

Sigue escribiendo.

mua :)